¿ Estas despierto?

 ¿ Estas despierto?

 

 

Estar despierto es aceptarlo todo, no como ley, no como sacrificio, ni como esfuerzo, sino por iluminación.

 

Lo importante es el Evangelio, no la persona que lo predica ni sus formas. No la interpretación que se le ha dado siempre o la que le da éste o aquél, por muy canonizado que esté. Eres tú el que tiene que interpretar el mensaje personal que encierra para ti, en el ahora. No te importe lo alguna religión o la sociedad prediquen.

 

La mayoría de las personas permanecen presas en las imágenes que han hecho de Dios. Ése es el mayor obstáculo para llegar a Él.

 

Si quieres llegar algún día a la unión con Dios, debes comenzar por el silencio.

 

Dios es la Verdad, la Felicidad y la Realidad, y Él es la Fuente, dispuesta siempre, para llenarnos en la medida en que, libremente, nos abramos a El.

Entra en la vida y estarás atendiendo la verdadera causa ... que no nos llama simplemente a una nueva religión, sino a la Vida.

El presente es la vida, y sólo allí están Dios y la eternidad. Por ello hay que vivir despierto, vigilante, para no perderte nada de ella.

Si no te aferras a ningún concepto, cosa o ideología, te será fácil descubrir en seguida dónde están la verdad y la realidad, que es la voluntad de Dios escrita en la vida.

 

Cada sonido es producido y sostenido por Dios omnipotente. Dios es sonido. Descansa tú en el mundo de los sonidos; descansa en Dios.

 

Espiritualidad es estar despierto. Desprenderse de las ilusiones.

Espiritualidad es nunca estar a merced de acontecimientos, cosa o persona alguna.

Espiritualidad es haber hallado la mina de diamantes dentro de ti.

 

Tú no necesitas un libro mágico, un gurú carismático, rituales primitivos. Sólo necesitas tus cinco sentidos. Obsérvate a ti mismo, tu cuerpo y tu mente. En ellos encontrarás todo lo necesario, además de los recursos que Dios te dio.

Prueba a verte a ti mismo con ojos nuevos, luego a las personas más cercanas, luego la naturaleza y, así, estarás más cerca de poder ver a Dios.

 

Para ser místico no necesito estar en un monasterio. Se puede muy bien ser pobre e ignorante de teorías y de leyes, y ser místico. Lo que hace falta es estar despierto a la vida.

Nuestra inteligencia tiene una parte conceptual y otra no conceptual. ¿Qué es el misticismo? Una unión.

La parte no conceptual está confinada de tal modo dentro de la parte conceptual que ésta debe abrirse para percibir la "intuición del ser".

 

 Ejercicios

 

• "Detecta" a Dios en el aire que se respira, en los sonidos que se escuchan, en las sensaciones que se sienten. Descansa en todo este mundo de los sentidos superiores.

Descansa en Dios. Entrégate al mundo, a Dios.

• Pronuncia el nombre de Cristo( Yo Soy) con diferentes actitudes o sentimientos: adoración, amor, confianza, entrega, deseo, arrepentimiento.

• Escucha que Él pronuncia a su vez tu nombre. ¿Cómo reaccionas, cuando Él lo pronuncia? ¿Qué sientes?

 

“Quien tenga sed, venga a mí y beba."

 

• Supongamos que, al leer, seas tocado por esta frase. ¿Qué harás? Recita esta frase en tu corazón y deja de leer. ¡Quien tenga sed, venga a mi y beba! Repite, repite, hasta que tu corazón quede satisfecho.

• No es necesario pensar en el significado de las palabras, porque tu corazón sabe el sentido. Y cuando llegues a ese punto de satisfacción, reaccionarás ante esas palabras.

 

 

 Reflexiones

 

• No necesitamos intentar percibir la Buena Nueva. Tenemos en nuestro interior una mina de diamantes, somos el Reino.

 

¿Has percibido ya el Reino dentro de ti?